
Los préstamos (también conocidos como "financiación") se producen cuando alguien permite que otra persona pida prestado algo. El prestamista entrega dinero, propiedad u otro activo al prestatario, con la expectativa de que el prestatario devuelva el activo o reembolse al prestamista. En otras palabras, el prestamista otorga un préstamo, lo que crea una deuda que el prestatario debe liquidar.